El retablo de Maese Pedro

Esta extraordinaria pieza para concierto del célebre compositor Manuel de Falla, es una adaptación escénica de un episodio del “Ingenioso Caballero Don Quijote de la Mancha” de Miguel de Cervantes.
En este episodio se narra cómo don Quijote asiste en una posada al relato que el titiritero Maese Pedro ofrece a los viandantes.
“El Trujamán cuenta la historia de la liberación de la bella Melisendra por su amado don Gayferos, que está cautiva en España, en poder de moros, en la ciudad de Sansueña.

Don Gayferos habrá de atravesar los Pirineos para llegar hasta el Alcázar de Zaragoza, donde el rey Marsilio tiene presa a Melisendra.

Mientras, un moro se llega por las espaldas de Melisendra y la da un beso en mitad de los labios….
El rey Marsilio castigará la insolencia del moro con doscientos azotes.

Finalmente don Gayferos consigue liberar a Melisendra, y regresan juntos a París.
Entre tanto don Quijote no discierne entre realidad y relato, y, creyéndose caballero andante, se ve en la obligación de ayudar a don Gayferos irrumpiendo contra los muñecos y el teatrillo del pobre Maese Pedro.
El Retablo de Maese Pedro es un espectáculo completo que aúna la música, coloreada por la presencia de timbres antiguos (clavicordio), las voces de los cantantes que escenifican los papeles del trujamán (soprano), Maese Pedro (tenor), Don Quijote (bajo), la escenificación con las Marionetas y la ambientación de la posada.
La compañía de Maese Villarejo representa esta obra con 43 muñecos en un escenario a semejanza de los carromatos de la época, ajustándose rigurosamente al texto y música según la partitura de Manuel de Falla.

Pedro y el lobo

Esta conocida obra de Sergei Prokofiev, puede servir de introducción a la música clásica para los niños, al mismo tiempo que representa un magnífico espectáculo para todos los públicos.
Se narra un cuento, en el que cada personaje está representado por un instrumento de la orquesta, y una marioneta en el escenario.
Un narrador nos cuenta cómo Pedro, el protagonista, jugando con sus amigos el pájaro (la flauta), el pato (el oboe) y el gato (el clarinete), son objetivo del hambre insaciable del lobo (las trompas). El abuelo (el fagot) advierte a Pedro del peligro del lobo. Entre todos conseguirán dar caza al lobo, y al final, con la ayuda de los cazadores (los timbales y el bombo) desfilarán triunfantes llevando al lobo al zoológico.

Los muñecos de Maese Villarejo representan fielmente la partitura de S. Prokofiev, dando a cada personaje la personalidad y el carácter que imprime la música en una historia musical maravillosa para niños y adultos..